Adobe Audition: introducción

 

 

En este tutorial introductorio al uso del programa Adobe Audition nos referiremos a su empleo para los fines que, como canaricultores de canto, más nos interesan, obviando otras muchas utilidades del programa. Aunque es recomendable emplear la última versión del programa (Audition 3), las funciones básicas del Audition no se han modificado desde su lanzamiento con el nombre de Cool Edit, por lo que esta introducción es aplicable a cualquiera de las versiones del programa.

 Hay que advertir previamente que pese a ser el Audition una herramienta imprescindible en la apreciación de las características del canto de nuestras aves, no debe ni puede sustituir a la impresión auditiva que dicho canto nos produce; es un apoyo básico en la interpretación del canto, no la varita mágica que nos dirá la calidad de éste.

Una vez instalado el programa, la primera pantalla que nos aparece al abrirlo es la siguiente:

 

 

Se trata de la “vista multipista”, empleada por mezcladores de sonido pero que nosotros raramente o nunca vamos a utilizar. Cambiaremos a la “vista edición” clicando sobre el icono “editar”, que he enmarcado en rojo. Hecho esto nos situaremos en la siguiente pantalla:

 

 

La función por la que se debe empezar en el manejo del programa y la que, con posterioridad, más frecuentemente emplearemos, es la de escuchar archivos de audio observando simultáneamente su forma gráfica en los sonogramas. Para ello abriremos un audio desde la pestaña “archivo” de la barra de herramientas. Una vez seleccionado éste obtendremos una vista como la que sigue:

 

 

Observaremos la denominada “visualización de forma de onda”, que no es demasiado útil para nuestros fines. Hemos de cambiar a la “visualización de frecuencia espectral” para lo cual clicaremos sobre el icono de la barra de herramientas enmarcado en rojo. Al hacerlo conseguiremos la siguiente vista:

 

 

Frecuentemente los archivos con los que trabajamos vienen grabados en estéreo y así nos aparecen representados en los sonogramas. Como se trata de canarios, que hasta la fecha no interpretan en estéreo, y es un tanto incómodo trabajar con la onda sonora duplicada, es preferible convertir los archivos a mono.

 

 

Para ello iremos a la pestaña “edición”  de la barra de herramientas y seleccionaremos “convertir tipo de muestra”. Nos aparecerá un cuadro en el que clicaremos la opción “mono” y aceptaremos, con lo que se fundirán ambos canales en uno solo

 

 

Esta es una pantalla típica de trabajo del Audition. Vemos la forma gráfica de los sonidos que escuchamos, con color más amarillo cuanta mayor es su intensidad. A la derecha nos aparece la barra de frecuencias (en Hertzios), de manera que los sonidos de la parte inferior del sonograma son los más graves y serán tanto más agudos  cuanto más se aproximen a la zona superior. Este archivo está grabado con la mayor resolución que permite el programa, es decir, desde 0Hz (graves inaudibles) hasta 22.000Hz (agudos también inaudibles para el oído humano). No es precisa una resolución tan exagerada pues por encima de los 14/16.000Hz los armónicos son ya casi inexistentes, como aquí podemos observar.

Para ampliar una zona concreta del audio en el que estemos trabajando clicaremos con el botón izquierdo del ratón sobre el comienzo del fragmento que deseamos ampliar y, manteniendo dicho botón izquierdo apretado, iremos desplazando el cursor sobre el sonograma hasta el final del área que queremos destacar. Resultará una zona sombreada que ampliaremos clicando sobre el botón superior derecho de la barra de herramientas “zoom”, que he destacado en rojo. Utilizando el resto de los botones de esta barra de herramientas conseguiremos ampliaciones o reducciones de las áreas que deseemos del audio. Para reproducir la totalidad del audio o la zona que hayamos seleccionado utilizaremos el botón “reproducir” de la barra de herramientas “transporte”, que también he destacado en rojo

 

 

Estos son los pasos esenciales para empezar a trabajar con el  Adobe Audition. El programa ofrece otras muchísimas posibilidades que deberemos ir descubriendo paso a paso por nuestra cuenta y con el apoyo de la ayuda del propio programa que encontramos clicando la pestaña “ayuda” de la barra de herramientas. No debemos asustarnos ante la infinidad de posibilidades que ofrece: poco a poco aprenderemos a usar aquellas que nos sean más útiles y prescindiremos del resto.

 

 




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